Enfermedades geriátricas: las dolencias más comunes en personas mayores

Su salud

Según el INE, 8,9 millones de españoles tienen más de 65 años. Con una población más envejecida que nunca, es normal que las consultas médicas se llenen de adultos mayores aquejados de alguna dolencia. Muchas de ellas, crónicas. En este artículo veremos cuáles son las enfermedades geriátricas más comunes.

Adelantamos que las principales causas son las de carácter circulatorio, osteoarticular, neurodegenerativo, osteoarticular y genitourinario. Más del 60% de los fallecimientos se deben a las enfermedades cardíacas, los infartos, el cáncer, las enfermedades respiratorias y la diabetes, siguiendo cálculos de las OMS.


Las 10 enfermedades geriátricas más comunes

1. Artritis/Artrosis

Los problemas en las articulaciones aumentan según se van cumpliendo años. Las personas mayores de 65 años, sobre todo las mujeres, sufren artritis, es decir, la inflamación de una articulación.

Cuando la artritis es grave, puede derivar en artrosis (la degeneración del cartílago articular). Esta enfermedad ocasiona dificultad para moverse y dolor al mover la articulación afectada.

2. Diabetes

Otra enfermedad geriátrica muy común. Los malos hábitos alimenticios, la vida sedentaria y el estrés están entre las causas principales.

3. Desnutrición/Obesidad

Los desórdenes alimenticios afectan a un amplio porcentaje de las personas mayores. Por una parte, están quienes han perdido el apetito y no consumen las suficientes vitaminas y proteínas. Esto puede derivar en desnutrición, deshidratación o anemia.

El caso opuesto es el de los mayores de 65 años que sufren obesidad.

4. Alzheimer/ Demencia senil

Al igual que lo hace el cuerpo, el cerebro también envejece. La consecuencia es la degeneración celular, que puede derivar en alzheimer o demencia senil.

5. Párkinson

Se trata de otra enfermedad neurodegenerativa como las anteriores. En este caso, causada por la pérdida de neuronas.

6. Problemas de vista/oído

A partir de una edad, es frecuente perder algo de vista, incluso de oído. Por eso, las personas mayores de 65 años deben hacerse una revisión todos los años. Con respecto a la vista, los problemas más comunes son: glaucoma, presbicia, miopía, cataratas y tensión ocular.

7. Hipertensión

La presión arterial alta es otro de los problemas asociados a la edad. No hay que tomársela a la ligera, pues puede ocasionar enfermedades mucho más graves, como un ataque cardíaco. Por eso es fundamental que las personas mayores se realicen chequeos médicos periódicos y adopten hábitos de vida saludables.

8. Infarto

Ya que hablamos de problemas de corazón, es importante recordar que los infartos son una de las principales causas de fallecimiento entre los mayores de 65 años.

9. Agrandamiento de próstata

Muy común también entre los hombres de la tercera edad es la hipertrofia de próstata. Lo que en principio es solo una dificultad para orinar, puede derivar en cálculos renales, infecciones graves e, incluso, cáncer de próstata. Para prevenir esta enfermedad geriátrica, los especialistas recomiendan beber agua antes de irse a dormir, no beber alcohol y reducir la ingesta de cafeína.

10. Osteoporosis

Una de las causas de que las personas mayores sufran fracturas fácilmente es por la pérdida de minerales como el calcio en los huesos. Para prevenir la osteoporosis es necesario incluir el calcio en nuestra dieta y realizar ejercicio.


Accidentes más frecuentes en las personas mayores

Las caídas son la principal causa de fallecimiento en las personas mayores de 65 años. También provocan numerosas fracturas debido al debilitamiento que van sufriendo los huesos de forma progresiva.

Muchos de estos accidentes se producen en casa donde, por cierto, los golpes, los cortes y las quemaduras son frecuentes.

Para evitar que nuestros mayores se hagan daño, todas las precauciones son pocas. Aun así, los accidentes suceden. En ocasiones no podemos prevenirlos, pero sí protegerlas por si acaso suceden.

Seguros de protección ante fracturas y quemaduras

Existen seguros específicos que sufren la rotura de huesos y quemaduras. La póliza Huesos Rotos y Quemaduras de Chubb indemniza a los asegurados que sufran fracturas, quemaduras o lesiones corporales como consecuencia de un accidente cubierto por la póliza.

La cuantía varía en función de los estipulado en cada póliza. No obstante, podemos decir que el porcentaje sobre el capital base puede llegar a ser del 60% en el caso de fracturas de múltiples zonas que incluya cadera o pelvis. Cuando la rotura incluye la pelvis o el talón, el importe es del 30% del capital base, lo mismo que una fractura complicada de cadera o pelvis o la dislocación de cadera.

Por su parte, las lesiones internas y la conmoción cerebral son indemnizadas con el 18%. En cuanto a las quemaduras de segundo o tercer grado, el importe a percibir oscila entre el 5% (cuando la superficie afectada es de hasta el 9%) y el 24% (más del 27% de la superficie corporal) del capital base.

Fuentes (consultadas en 24 enero del 2020): Ayuda Familiar, Cuideo, OMS.

Es importante tener en cuenta que esta información es solo para fines de información general. No constituye un consejo personal o una recomendación para ninguna persona o empresa de ningún producto o servicio.