¿Qué hacer en caso de quemadura?

Su salud

Una exposición prolongada al sol, aceite caliente, agua hirviendo, la plancha de la ropa, el contacto con alguna sustancia química, un fallo eléctrico… Todos esos accidentes provocan quemaduras que deben ser tratadas. ¿Usted sabría qué hacer en caso de quemadura? Se lo explicamos.

Cuando las quemaduras son leves bastará con refrescar la zona y aplicar una buena pomada, pero esto no sirve para todos los casos. Por eso, lo primero es aprender a diferenciar los diferentes tipos de quemaduras.


Tipos de quemaduras según su gravedad

Atendiendo a la gravedad de las quemaduras, estas se dividen en tres tipos:

  • Quemaduras de primer grado: afectan solo a la capa externa de la piel, por que lo normal es que puedan tratarse en casa. No obstante, cuando afectan al rostro o la zona quemada mide más de 7 centímetros, hay que acudir al médico.
  • Quemaduras de segundo grado: además de enrojecimiento, hinchazón y dolor, en la piel salen ampollas. Afecta tanto a la capa externa de la piel como a las subyacentes. Pueden requerir un tratamiento con antibióticos prescrito por el médico.
  • Quemaduras de tercer grado: en este caso debe llamar o acudir a urgencias, pues requieren de atención médica urgente. Este tipo de lesiones llegan hasta las capas de la piel más profundas. La zona puede mostrarse blanquecina (es signo de que no hay circulación sanguínea) o ennegrecida.

¿Cómo distinguir la gravedad de las quemaduras? Además del aspecto exterior de la piel, es importante señalar que las quemaduras que no duelen suelen ser más graves, ya que pueden indicar que se han quemado las terminaciones nerviosas.


Tipos de quemaduras más frecuentes

Del mismo modo, los consejos sobre qué hacer en caso de quemadura variarán en función de las causas que hayan provocado la lesión cutánea. Estas son las más frecuentes:

  • Quemaduras por radiación: están provocadas por tomar el sol sin protección o exponerse a sus rayos durante demasiado tiempo. Por regla general bastará con aplicarse una pomada específica.
  • Quemaduras por calor: son las provocadas, por ejemplo, por líquidos calientes (aceite o agua hirviendo), fuego, el horno o la plancha de la ropa. Lo ideal sería tener en casa siempre una pomada para quemaduras, pero úsela solo si estas no son graves.
  • Quemaduras por fricción: son similares a un rasponazo. Como en el caso anterior, suele ser suficiente con aplicar una crema para quemaduras leves.
  • Quemaduras eléctricas y químicas: es recomendable acudir al médico lo antes posible, pues la lesión podría estar progresando aunque no lo aprecie a simple vista.

¿Cómo tratar las quemaduras leves?

Cuando las quemaduras son superficiales, los pasos que usted debe seguir son los siguientes:

1. Enfriar la zona afectada con agua fría durante 5 minutos para aliviar el dolor y la hinchazón.
2. Tapar la quemadura con un vendaje que no se pegue a la herida.
3. Pasada la fase aguda de la quemadura, aplicar una pomada y proteger la quemadura hasta que sane.

Lo que nunca debe hacer es poner hielo, frotar la quemadura o romper las ampollas. Olvídese también de los remedios caseros como la pasta de dientes.

¿Puedo asegurarme contra accidentes por quemaduras?

¿Le preocupa sufrir un accidente que le produzca quemaduras y no poder trabajar? Los seguros de accidentes como el de Chubb indemnizan a los asegurados que enfermen o sufran un accidente, ya sea en el trabajo o en el ámbito doméstico.

Lo mismo ocurre con las pólizas de invalidez. En el Plan Piensa en Ti: Discapacidad Permanente y Huesos Rotos de Chubb, se establece una indemnización económica en caso de sufrir quemaduras (también fracturas y lesiones internas). Las personas aseguradas recibirán una cuantía que queda especificada en cada póliza. Este seguro cubre durante las 24 horas del día, en cualquier lugar del mundo.

Fuentes: Primeros auxilios para las quemaduras: preguntas frecuentes de los padres, Quemaduras.

Es importante tener en cuenta que esta información es solo para fines de información general. No constituye un consejo personal o una recomendación para ninguna persona o empresa de ningún producto o servicio.